Nuestras comunidades en toda la región ya están preparando para la fiesta de Pentecostés que este año convoca vigilias hacia la madrugada del sábado 18 de mayo.
La presencia de este “aire Santo”, este “soplo de Dios”, renovará toda la faz de la Patagonia aysenina animando nuevamente el camino Sinodal que la Iglesia de Aysén recorre desde 2018, con distintos encuentros y reuniones en las parroquias de la región, en comunión con toda Iglesia chilena.
Celebraciones
La parroquia de Chile Chico, Nuestra Señora del Carmen, festejará Pentecostés en la celebración eucarística del domingo 19 de mayo de 2024, a las 11:00 horas.
La parroquia Nuestra Señora de los Dolores de Coyhaique tendrá su tradicional vigilia de Pentecostés el sábado 18 de mayo en la capilla de la comunidad Cristo Obrero, desde las 19:30 horas, coordinada y animada por el Movimiento de Acción Carismática de la capital regional.
Los jóvenes de las comunidades y establecimientos educacionales de la parroquia de Coyhaique también celebrarán Pentecostés con la llegada del Espíritu Santo el sábado 18 de mayo, a las 14:00 horas, en el gimnasio del colegio Mater Dei, ubicado en Simón Bolívar 380.

Los niños y niñas de Coyhaique celebrarán la llegada del Espíritu Santo con el “Penteniños”, actividad que se realzará el sábado 18 de mayo de 16:00 a 17:30 horas en la catedral de la capital regional.
En Puerto Aysén, la parroquia Santa Teresita, nos informa el párroco, padre José Vera, la vigilia será el sábado 18 de mayo, de 20:00 a 00:00 h. en la capilla de la comunidad Buen Pastor, sector Ribera sur.
Compartimos, a continuación, esta bella secuencia de Pentecostés, invocación al Espíritu Santo, a cuya versión musicalizada puedes acceder haciendo CLIC AQUÍ.
Ven, Espíritu Santo,
y envía del Cielo
un rayo de tu luz.
Ven, padre de los pobres,
ven, dador de gracias,
ven luz de los corazones.
Consolador magnífico,
dulce huésped del alma,
su dulce refrigerio.
Descanso en la fatiga,
brisa en el estío,
consuelo en el llanto.
¡Oh luz santísima!
llena lo más íntimo
de los corazones de tus fieles.
Sin tu ayuda,
nada hay en el hombre,
nada que sea bueno.
Lava lo que está manchado,
riega lo que está árido,
sana lo que está herido.
Dobla lo que está rígido,
calienta lo que está frío,
endereza lo que está extraviado.
Concede a tus fieles,
que en Ti confían
tus siete sagrados dones.
Dales el mérito de la virtud,
dales el puerto de la salvación,
dales la felicidad eterna.